Seguidores

domingo, 30 de marzo de 2008

RECUERDOS DE LA INFANCIA Y DE LA ADOLESCENCIA







RESPONSABILIDAD


Cumple con tu deber
sé señor de ti mismo,
no te mande ni el compañero vicioso
ni la fútil atracción de la calle.


SANTIDAD


Yo, ¿ para que nací ?
para salvarme,
que tengo que morir
es infalible,
dejar de ver a Dios
y condenarme,
triste cosa será
pero posible.
¿ Posible,
y río y duermo y quiero holgarme ?
¿ Posible,
y tengo amor a lo visible ?
¿ Qué hago, en qué me ocupo,
en qué me encanto ?
loco debo de ser
pues no soy santo.

CONCIENCIA


Conciencia nunca dormida,
mudo y pertinaz testigo,
que no deja sin castigo
ningún crimen en la vida.
La ley calla,
el mundo olvida,
mas ¿ quién sacude tu yugo ?
al Sumo Hacedor le plugo
que, a solas con el pecado,
fueras tú para el culpado
delator, juez y verdugo.







COMENTARIO BREVE.

A lo largo de la vida vivimos experiencias que nos dejan recuerdos que se fijan indeleblemente en nuestra mente.

RESPONSABILIDAD

Es el caso del pensamiento que, con pretensiones formativas, reiteraba el canónigo don Serafín, mi profesor de Apologética en Ciudad Rodrigo, en la década de 1.940, tratando de formar nuestro carácter.
Esa lección magistral de don Serafín, respecto al CUMPLIMIENTO DEL DEBER Y A LA LABORIOSIDAD, es todo un programa de vida, que pretendí tener en cuenta siempre.

SANTIDAD

Esos versos anónimos que se inician con esa interrogante, que, en algún momento, todos podemos hacernos: YO, ¿ PARA QUÉ NACI ? me trasladan a Salamanca y a la Iglesia de la Plaza Mayor, en la década de 1.950, donde el dominico Padre ROYO MARÍN, con oratoria difícilmente superable, dedicó unas conferencias cuaresmales a estrujar esos versos para extraer su rica savia salvadora.

CONCIENCIA

Hoy que pocas veces se habla de LA CONCIENCIA, me parece que es necesario recordarla. 

Y lo hago con esta poesía del poeta y escritor NÚÑEZ DE ARCE
( 1.834 - 1.903 ) que memoricé siendo niño, sin saber cuál era su autor.

Bien pudiera servir de termómetro de exigencias y de guía, que habríamos de respetar siempre en el trato y convivencia que tenemos con los demás.

Si todos tuviéramos conciencia formada y exigente y actuáramos conforme a ella, no serían necesarias las leyes que regulan las relaciones entre los seres humanos.

domingo, 16 de marzo de 2008

EL POETA JOSÉ MARÍA GABRIEL Y GALÁN DEFENSOR DE LAS HURDES













El REY ALFONSO XIII, CON 18 AÑOS, VISITÓ SALAMANCA EN 1.904 DONDE ESCUCHÓ AL POETA ESTA DEFENSA DE LA CAUSA HURDANA


Señor, no soy un juglar:
soy un sincero cantor
del castellano solar.
Canto el alma popular;
No tengo nombre, señor.

Por eso, porque un oscuro,
porque un sincero es quien canta
y no un cortesano impuro,
oiréis el de mi garganta
canto llano, pobre y duro.

Más placerá a vuestro oído
el débil trinar sentido
del pájaro del erial
que el resonante graznido
del hueco pavo real.

Señor: si en ese sagrado
solar de español sentir
han ante vos ocultado
con luz de vivir dorado
sombras de negro vivir,

mintió la vieja embustera
que llaman cortesanía...
Mejor a su rey sirviera
si, en bien de la patria mía,
verdad a su rey dijera.

No sé con reyes hablar;
mas bien podréis perdonar
que yo platique con vos
tal como en son de rezar
platico de esto con Dios.

Estáme la fe enseñando
y estáme el amor diciendo
que todo se torna blando
a nuestro Dios invocando
y a nuestro rey requiriendo.

Que Dios corona a los reyes
para que a mundos mejores
lleven innúmeras greyes,
mejor que atadas con leyes,
sueltas en cursos de amores.

Señor: en tierras hermanas
de estas tierras castellanas,
no viven vida de humanos
nuestros míseros hermanos
de las montañas jurdanas.

Señor: no oigáis las canciones
de las doradas sirenas
que sólo cantan ficciones...
Los más grandes corazones
son los que arrastran más penas.

Dolor de cuantos los vieren,
mentís de los que mintieren,
aquí los parias están...
De hambre del alma se mueren,
se mueren de hambre de pan.

Hasta este monte eminente
donde rimo mis cantares
sube famélica gente
que mis modestos manjares
devora violentamente...

Tanta pena he contemplado
que unas veces he llorado
con llantos de compasión,
y otras mi voz ha velado
gemidos de indignación.

Porque infama la negrura
de la siniestra figura
de hombres que hundidos están
en un sopor de incultura
con fiebre de hambre de pan.

Limosna de un rey cristiano
es manantial soberano
de grande consolación...
Mas nunca llega la mano
donde llega el corazón.

La patria es madre amorosa
que hace milagro de amores...
¡ Tienda una mano piadosa
que disipe los horrores
de esta visión afrentosa!

Señor: no soy un juglar.
Yo nunca rimo un cantar
si no me lo pide amor.
La patria me hizo vibrar...
¡Patria sois también, señor!


 


COMENTARIO BREVE.

Difícil es valorar la importancia que tuvo esta defensa de Las Hurdes en las decisiones que luego se adoptaron en su favor por el Gobierno de España.

Pero no cabe dudar de la buena intención del poeta al sembrar esta semilla de esperanza.

Lo lamentable fue que esta semilla, plantada por el poeta en 1.904, tardara 18 años en nacer, pues, como se sabe, el primer viaje del rey Alfonso XIII a Las Hurdes no se produce hasta 1.922, con el que empieza a dar frutos esta parte de la estrofa:


¡ Tienda una mano piadosa
que disipe los horrores
de esta visión afrentosa !



Muy lamentable es también que este ilustre defensor de LAS HURDES, además poeta reconocido, falleciera en plena juventud, pocos meses después en su pueblo extremeño, convirtiéndose su DEFENSA DE LOS HURDANOS ANTE EL MONARCA en un lamento histórico que los hurdanos no deberíamos olvidar.

JOSÉ MARÍA GABRIEL Y GALÁN

‎28 de junio de 1870; ‎Frades de la  Sierra (Salamanca) -  + ‎6 de enero de 1905 GUIJO DE GRANADILLA ( Cáceres)

En septiembre de 1904, que es cuando se cree PROCLAMA lo anterior ante Alfonso XIII en Salamanca, tenía 34 años, los mismos que  cuando falleció el 6 de enero de 1905, según unos como consecuencia de apendicitis aguda y de pulmonía mal curada, según otros.